
Hasta pronto

Cuando el escritor se sentó en la silla, delante del ordenador, y notó que las ideas no fluían como de costumbre, y que el vuelo de las moscas era más importante que el cursor parpadeante de la pantalla, entendió que necesitaba unas vacaciones.
No pensaba irse a ningún lugar, no tenía previsto coger ningún avión, ni perderse entre culturas desconocidas para él. No, aquel año no tocaba, aquel año no se lo podía permitir, pero le daba igual, viajaría de otra forma, viajaría montado en las páginas de los libros que leería, vigilando sus espaldas por si el inquisidor Glokta decidía apuñalarle a traición. Rezaría para no ser poseído por la Shaod, y pensaría en nuevas aventuras con las que sorprender a sus lectores.
Volvería unas semanas después con las energías renovadas porque sabía que, las personas que le dedicaban su tiempo a diario, no merecían que él escribiera a medio gas. El respeto hacia el lector es fundamental, eso es algo que el escritor tenía grabado a fuego en su interior, y aquel respeto le obligaba a dejar de escribir, tomar distancia, respirar hondo y volver con más fuerza. ■
Pues sí, quería despedirme de vosotros/as, pero no quería hacerlo con un simple «¡me voy!». Me he querido despedir con lo que hago cada dos días, un pequeño relato. Volveré el día once de septiembre, con nuevas ideas, con las neuronas descansadas, y con más ganas que nunca. Pensaré en novedades, pensaré en qué cosas de este blog han funcionado esta temporada, y qué cosas sobran.
Podréis encontrarme en Twitter, una red social que cada vez me gusta más. Y en mi cuenta personal de Instagram, donde subo cosejas distintas.
Os quiero agradecer, como siempre, el tiempo que me dedicáis, vuestros «me gusta», vuestros comentarios. Y deciros que sin vosotros/as, este blog solo seria el espacio digital de un escritor zumbado hablando para sí mismo. Mil gracias, os adoro.
Aquí estaremos, expectantes. Descansa, que ¡te lo mereces!
¡¡Gracias!! I’ll be back! jejejeje
Como dijo Serrar, hoy las musas han pasao de mi, estarán de vacaciones, y tu también. Te lo mereces. Hasta pronto.
¡Jajajaja! Gracias, y gracias por la referencia. Serrat siempre es bienvenido a este blog. Un abrazo.